El Mecanismo Laboral de Respuesta Rápida del Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC) es un instrumento del que se abusa, por lo que es necesario regular su aplicación, opinó Óscar de la Vega, apoderado legal de Volkswagen de México.
El abogado dijo que las empresas demandadas no saben qué grupos las acusan y no hay oportunidad de defensa.
“En la revisión del T-MEC, en 2026, es necesario regular el Mecanismo de Respuesta Rápida, en el sentido de que las empresas involucradas están en un total y absoluto estado de indefensión. Como no está regulado, no saben quién las acusa, quién detona el Mecanismo, pueden ser anónimas, son confidenciales por parte del Gobierno estadounidense, no te dice quiénes son los que lo detonan”, mencionó De la Vega después de que los Gobiernos de México y Estados Unidos dieron a conocer que se resolvió la queja en contra de la armadora.
“No puede uno ver las pruebas que están ofreciendo, no puedes objetarlas, no puedes repreguntar a los testigos y gente que participa en las investigaciones del Gobierno estadounidense, y te pueden sancionar sin haber sido escuchado, que es la garantía del debido proceso”, sostuvo en entrevista.
VW fue objeto de una denuncia vía el Mecanismo Laboral de Respuesta Rápida por parte de la Red de Mujeres Sindicalistas, la cual acusó a la empresa de haber despedido a un grupo de trabajadores por su actividad sindical.
Después de una investigación, el Gobierno de Estados Unidos dio entrada a la queja laboral al considerar que se incurrió en violaciones a los derechos de asociación y negociación colectiva.
“La Red de Mujeres Sindicalistas hablaba de que había un patrón de despedir a todos los líderes sindicales, pero no hay ese patrón, no existe, y el Gobierno mexicano lo investigó y resolvió que no existía ese patrón”, refirió De la Vega.
No obstante, para cerrar la queja, la empresa se comprometió a llevar a cabo una serie de medidas, como reincorporar y otorgar salarios retroactivos y beneficios completos a ocho trabajadores que habían sido despedidos, además de publicar, difundir e implementar su declaración de neutralidad y las directrices de la empresa sobre libertad de asociación y negociación colectiva.
De la Vega enfatizó que se requiere una reglamentación para que funcione mejor el Mecanismo.
“En estos procesos te sientes como en los procesos de la Santa Inquisición: no sabes por qué te acusan o quien te acusa. Este proceso (contra Volkswagen) se resolvió de manera acertada y no hubo una denegación de la libertad de asociación”, manifestó.