● La falta de una reglamentación precisa en la aplicación del MLRR sigue siendo un punto crítico.
● Hacemos un llamado al gobierno mexicano a trabajar en conjunto con el sector privado para plantear ajustes
Ciudad de México a 2 de octubre de 2025.- A medida que se acerca la revisión formal del Tratado Comercial entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC) en 2026, el sector empresarial mexicano expresa su preocupación y hace un llamado a una mayor claridad y regulación en la aplicación del Mecanismo de Respuesta Rápida (MLRR) en materia laboral.
Eduardo Arrocha, experto en comercio internacional y abogado consultor de De la Vega & Martínez Rojas, destacó que la próxima revisión del tratado no es una renegociación, sino una oportunidad para ajustar y corregir el funcionamiento del mismo. “Las partes interesadas, incluyendo cámaras de comercio, empresarios y sindicatos, tienen hasta el 1 de junio de 2026 para presentar sus recomendaciones, con un plazo de 60 días naturales a partir de su publicación en el Diario Oficial de la Federación (DOF) para la entrega de propuestas en México”.
En ese sentido, dijo que la principal inquietud del sector empresarial relacionado con el tema laboral radica en el uso del Mecanismo Laboral de Respuesta Rápida, diseñado para preservar la libertad de asociación y contratación colectiva. “Si bien Estados Unidos ha sido el principal usuario de este mecanismo, con más de treinta quejas, existe una creciente preocupación en México de que el MLRR esté siendo utilizado en situaciones que van más allá de su propósito original”.
En ese sentido, el experto relató que “hemos observado casos en los que se ha abusado del Mecanismo Laboral, aplicándose a situaciones que no corresponden a la libertad de asociación y contratación colectiva. Esto deja a las empresas en un estado de indefensión, sin la precisión necesaria sobre las acusaciones para poder defenderse adecuadamente, generando problemas económicos y de imagen pública».
A pesar de que México ha cumplido con sus obligaciones laborales en el marco del Anexo 23-A, incluyendo la reforma laboral y la legitimación de contratos colectivos, la falta de una reglamentación precisa en la aplicación del MLRR sigue siendo un punto crítico. Por ello, “hacemos un llamado al gobierno mexicano a trabajar en conjunto con el sector privado para plantear ajustes o una reglamentación clara que evite el litigio de asuntos ajenos a la libertad de asociación y colectiva bajo este mecanismo”.
Destacó que el sector empresarial mexicano confía en que la revisión del T-MEC sea una oportunidad para fortalecer el tratado y asegurar un marco justo y equitativo para todas las partes, protegiendo los derechos laborales sin menoscabar la seguridad jurídica de las empresas.


