Ante la incertidumbre económica, la disminución de las exportaciones y las tensiones derivadas de la revisión del T-MEC junto con el aumento del costo de la nómina, el país atraviesa por una etapa de paros técnicos, sobre todo en el sector automotriz y de autopartes.
Los paros técnicos son una medida cada vez más frecuente entre las empresas formales, manifestó Óscar de la Vega, socio fundador del despacho De la Vega y Martínez Rojas.
El abogado destacó que el suspender temporalmente ciertas operaciones o turnos es una medida que se toma por la falta de claridad en el panorama económico por la incertidumbre económica y la renegociación del T-MEC.
“Como no sabemos qué va a pasar, entonces se detona una suspensión de los efectos de las relaciones de trabajo. Generalmente se negocia algo, como un 50 por ciento de los salarios.Óscar de la Vega.
“Los trabajadores no laboran, pero se mantiene la relación de trabajo, para ver qué es lo que va a suceder en unos meses”, comentó el abogado especialista en Derecho Laboral.
De acuerdo con el especialista, aunque los “paros técnicos”, son una medida aunque legal y temporal, reflejan la presión que enfrentan las compañías frente a un marco regulatorio más rígido ante las reformas laborales que, si bien buscan mejorar las condiciones de los trabajadores, no siempre toman en cuenta la realidad económica de las micro y pequeñas empresas, principales generadoras de empleo en el país.
Advirtió que el próximo año se pueden dar una serie de emplazamientos a huelga y huelgas, dado que la situación económica de las empresas no es la correcta. Ello se suma a que los sindicatos elegidos por la vía democrática buscarán aumentos salariales, mejores prestaciones y condiciones de trabajo a través de emplazamientos a huelga.
El abogado indicó que el endurecimiento de las condiciones laborales y el aumento del costo laboral pueden derivar en la pérdida de empleos formales.
También señaló que, de acuerdo con datos del Inegi, más del 50 por ciento de la Población Económicamente Activa (PEA) se encuentra en la informalidad, dado que buscan evitar cargas fiscales como la Seguridad Social, el Infonavit, el Servicio de Administración Tributaria (SAT), entre otros.
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En muchos países, por ejemplo España, las empresas que tienen menos de 50 trabajadores las apoyan. Y hacen una diferenciación con la gran empresa, son muy sólidas y tienen beneficios como la semana de 40 horas.Óscar de la Vega.
Óscar de la Vega consideró que para revertir el aumento de los paros técnicos y de la informalidad, se debe apoyar a las MiPymes a través de incentivos fiscales y créditos que les permitan amortiguar el impacto de los cambios económicos y laborales por los que atraviesa tanto nuestro país como el mundo.
También se les debe dar mayor flexibilidad en la aplicación de las reformas laborales, ya que como destaca un análisis del Banco Mundial (BM) a mayor flexibilidad de la legislaciones laborales, mayor empleo formal.
Luego el abogado laboralista se pronunció “por fortalecer a la micro, a la pequeña empresa, que es empresa nacional, a través de créditos, incluso con un marco legal diferente a la gran empresa”.
