En el desarrollo de habilidades y formación de talento al interior de las empresas, una técnica que ha empezado a marcar tendencia es la del aprendizaje a la medida, por práctica y con un enfoque en la autogestión, la cual es un símil de la forma de entrenamiento físico en los gimnasios.
Uno de los grandes retos de las áreas de Capital Humano es impulsar el desarrollo de las competencias de las personas para lograr un mejor desempeño del plan de negocios y, a la vez, una mejor experiencia del colaborador.
Desde el 70/20/10 hasta los simuladores, las técnicas de entrenamiento y formación han evolucionado buscando que la efectividad sea mayor. En este marco aparece una nueva tendencia llamada “gimnasio de competencias” que busca generar un aprendizaje a la medida, más concentrado en la práctica y con mayor enfoque en la autogestión.
1. Aprendizaje a la medida
La evolución de la forma en que se organizan las empresas nos ha llevado al terreno de la agilidad. En este contexto, ya no sirven los programas masivos, donde las personas reciben contenidos generales que luego deben tratar de aplicar a sus necesidades: ¡Ya no hay tiempo para eso! Además sale muy costoso en recursos y tiempo.
Por lo anterior, el enfoque de gimnasio de competencias busca responder a la necesidad específica de cada persona, aún y en contextos masivos. Es decir, es tal como un gimnasio, donde la persona encuentra diversas herramientas, pero su rutina y entrenamiento se enfoca únicamente en aquello que necesita, partiendo primero de un diagnóstico que le permite adecuar su plan y definir objetivos específicos.
2. Aprendizaje por práctica
Como en un gimnasio, el entrenamiento de competencias está basado en la ejecución, no en la conceptualización. Es decir, cuando vas al gimnasio de competencias, vas a encontrarte con ejercicios, herramientas y desafíos que exponen a la persona a los elementos que necesita desarrollar, practicando en aquellas cosas que le van a permitir “desarrollar músculo”, lo cual además lo deja listo para aplicar en la vida real.
La práctica de herramientas o habilidades tiene una guía especializada de un coach, como lo haría un entrenador en un gimnasio, que diseña la rutina correcta para asegurar que realmente la persona aprende.
3. Aprendizaje basado en el autodesarrollo
Uno de los elementos más difíciles de conseguir está en que las personas persigan su propio desarrollo, y que además lo hagan motivados (no presionados). El gimnasio de competencias está diseñado para que el entrenamiento práctico genere un alto nivel de satisfacción y con esto la persona esté enganchada para seguir y avanzar.
El tipo de retos y desafíos que encontrará en este ambiente y las herramientas que va a ir adquiriendo le demostrarán qué tanta práctica necesita y con ello las ganas de superar sus propias metas harán que se mantenga conectado. Lo anterior, sumado a la tendencia de aprendizaje en comunidad, tiene el mismo efecto que el ejercicio en equipo, pues mantiene el nivel de disciplina como resultado de la interacción y motivación de unos a otros.
Estos mecanismos de aprendizaje se pueden diseñar para todo tipo de competencias, tanto técnicas como de liderazgo o gestión, incluso pueden diseñarse para impulsar procesos de transformación cultural donde se requieran cambios en los comportamientos de las personas.
Un elemento muy significativo de esta metodología está en que el diseño de las estrategias de desarrollo considera que las personas vamos aprendiendo paso a paso, es decir cada competencia tiene niveles como los de un videojuego que permite avanzar en la medida en que se superan los objetivos, con lo cual la persona va ganando dominio y confianza en los nuevos comportamientos o conocimientos.
Todo esto permite aplicar el gimnasio de competencias para realizar certificación de roles en cualquier función o área de una empresa. También se aplica de forma muy efectiva en programas de talento acelerado, altos potenciales e incluso jóvenes talentos.
Pensando en la posibilidad de impulsar aún más estos gimnasios, el uso de la inteligencia artificial permite crear una experiencia de aprendizaje única e innovadora, pues se puede desarrollar una plataforma completamente personalizada, en un ambiente virtual con uso de avatares y combinarlo con otras aplicaciones que planteen para el participante una dinámica inesperada que genere curiosidad y mayor interés.
ealmente, esta tendencia se puede llevar a niveles tan diversos y divertidos que hagan que las personas vean su desarrollo como una actividad que les gusta y a la que quieran dedicar tiempo.